La descarga al océano de los desechos provenientes de la Planta de Celulosa de Valdivia en la caleta de Mehuín, amenaza no sólo el principal sustento que tienen los pescadores artesanales y el comercio del sector sino que también, la cultura ancestral del pueblo mapuche.
Por Claudia Walter
Impotencia es el sentimiento que prima entre los opositores al ducto. “En Chile, se ha pisoteado al pueblo mapuche y se sigue haciendo, no hay respeto por nuestra cultura. Nuestro pueblo está ligado en su totalidad al mar, nuestros alimentos provienen de ahí y se complementan con lo que nos da la tierra. Lo que nosotros defendemos es nuestro sistema de vida ¿Cómo vamos a dejar que vengan de afuera a cambiar lo que siempre se ha hecho acá? Los pescadores artesanales también tienen derecho a seguir trabajando en el mar y no depender de un trabajo que le venga a ofrecer una celulosa, porque eso es lo que hacen: convierten a las personas en trabajadores de su pertenencia. Lo mismo ocurrirá con el comercio de Mehuín. Todos los negocios están relacionados con el turismo, y la gente que nos visita busca comer mariscos frescos y sanos”, sostiene Teresa Nahuelpan, mapuche Lafkenche e integrante del Comité del Movimiento por la Defensa del Mar.
La Corte de Apelaciones de Valdivia, rechazó hace unas semanas el recurso de protección interpuesto por las Comunidades Mapuche Lafkenche de la comuna de la Mariquina, que pretendía dejar sin efecto la Resolución de Calificación Ambiental de la Corema de los Ríos aprobada el pasado 23 de febrero, durante la últimas semanas del gobierno de Bachelet. El estudio de impacto ambiental denominado “Sistema de Conducción y Descarga al Mar de Afl uentes Tratados de la Planta de Valdivia” de la empresa Celulosa Arauco y Constitución S.A. (CELCO) señala que de construirse el ducto, tendría 36, 9 kilómetros y 2.075 metros de emisario submarino que transportaría las descargas hasta la caleta Mehuín. El dirigente del Comité de Defensa del Mar, Eliab Viguera, dijo que la decisión de la Corema “…demostró que el Gobierno debe pagar los favores hechos por Arauco, por lo tanto, no son importantes los argumentos técnicos ni sociales…” Agregó que “Se cometió una grave irregularidad al aprobar el trazado del ducto encima de un área de manejo y de explotación de recursos bentónicos.” Además, denunció que Celco sugiere que los que firmaron el convenio les dan pleno derecho para usar el Área de Manejo “Pero estos espacios costeros son bienes nacionales de uso público, no se pueden arrendar ni vender. Se instituyeron, se supone, para preservar los recursos pesqueros”.
Equipo Diario UNO
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Impotencia es el sentimiento que prima entre los opositores al ducto. “En Chile, se ha pisoteado al pueblo mapuche y se sigue haciendo, no hay respeto por nuestra cultura. Nuestro pueblo está ligado en su totalidad al mar, nuestros alimentos provienen de ahí y se complementan con lo que nos da la tierra. Lo que nosotros defendemos es nuestro sistema de vida ¿Cómo vamos a dejar que vengan de afuera a cambiar lo que siempre se ha hecho acá? Los pescadores artesanales también tienen derecho a seguir trabajando en el mar y no depender de un trabajo que le venga a ofrecer una celulosa, porque eso es lo que hacen: convierten a las personas en trabajadores de su pertenencia. Lo mismo ocurrirá con el comercio de Mehuín. Todos los negocios están relacionados con el turismo, y la gente que nos visita busca comer mariscos frescos y sanos”, sostiene Teresa Nahuelpan, mapuche Lafkenche e integrante del Comité del Movimiento por la Defensa del Mar.
La Corte de Apelaciones de Valdivia, rechazó hace unas semanas el recurso de protección interpuesto por las Comunidades Mapuche Lafkenche de la comuna de la Mariquina, que pretendía dejar sin efecto la Resolución de Calificación Ambiental de la Corema de los Ríos aprobada el pasado 23 de febrero, durante la últimas semanas del gobierno de Bachelet. El estudio de impacto ambiental denominado “Sistema de Conducción y Descarga al Mar de Afl uentes Tratados de la Planta de Valdivia” de la empresa Celulosa Arauco y Constitución S.A. (CELCO) señala que de construirse el ducto, tendría 36, 9 kilómetros y 2.075 metros de emisario submarino que transportaría las descargas hasta la caleta Mehuín. El dirigente del Comité de Defensa del Mar, Eliab Viguera, dijo que la decisión de la Corema “…demostró que el Gobierno debe pagar los favores hechos por Arauco, por lo tanto, no son importantes los argumentos técnicos ni sociales…” Agregó que “Se cometió una grave irregularidad al aprobar el trazado del ducto encima de un área de manejo y de explotación de recursos bentónicos.” Además, denunció que Celco sugiere que los que firmaron el convenio les dan pleno derecho para usar el Área de Manejo “Pero estos espacios costeros son bienes nacionales de uso público, no se pueden arrendar ni vender. Se instituyeron, se supone, para preservar los recursos pesqueros”.
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